Dentro de este grupo (uso de la informática y robótica para crear) existen tres campos de actuación que pueden ser complementarios:
- Creación y visualización de figuras en tres dimensiones.
- Digitalización de objetos reales y posibles transformaciones.
- Elaboración física de objetos con máquinas de control numérico previamente diseñado por ordenador.
Este último concepto es el de crear objetos quitando o agregando material, como ha hecho el hombre desde los albores de la humanidad para materializar sus sueños.
Otra posibilidad digna de mención es la tele-escultura que consiste en crear virtualmente (en la pantalla del ordenador) y enviar la ordenes vía cable o satélite a través de Internet para que una maquina situada en un lugar diferente realice la escultura. En este caso la maquina realizaría la obra justo en el momento de ser ordenada de forma teledirigida.
Una de las posibilidades es trabajar escaneando una obra, persona o cualquier cosa sólida para después reproducirla en el material que deseemos. Esto aparatos escanean el objeto por medios de rayos y retienen en un ordenador un archivo que define el objeto en sus tres dimensiones. El antiguo asunto del pantógrafo espacial que tantos dolores de cabeza ha dado a los artistas e ingenieros del renacimiento esta por fin resuelto.
Desde el origen de la escultura asistida por ordenador se ha buscado a visualizar la obra pero también a fabricarla. A partir de los años 70 se ha desarrollado los tornos y fresadoras de control numérico. En los años 80 aparecieron nuevas máquinas de corte por láser, plasma o chorros de agua que aumentan el rendimiento y las posibilidades de las anteriores.
En estos últimos años se han inventado maquinas con posibilidades creativas nunca vistas anteriormente, lo que las máquinas anteriores pueden fabricar, se puede hacer a mano con mucho mas lentitud y menor precisión, pero se puede hacer. Con estas maquinas se han creado obras realmente increíbles y muy bellas, es realmente, a mi opinión, una gran revolución en el mundo del arte.
Metatron y vorocube obras de la artista: Bathsheva Grossman
La escultura basada en Inteligencia Artificial (IA) es un nuevo género de arte que une la inventiva humana con la tecnología de punta. Los artistas que emplean este método son capaces de producir obras en tres dimensiones a partir de datos, imágenes, sonidos o textos, haciendo uso de algoritmos de aprendizaje automático, redes neuronales y generación de imágenes.
Un caso destacado de esto es “La estatua imposible”, una pieza producida por The AI Framework y Sandvik, un conglomerado industrial especializado en ingeniería de alta tecnología. Esta escultura se concibió entrenando diversos modelos de IA en la obra de cinco de los escultores más renombrados del mundo, fusionando sus estilos distintivos. Los artistas elegidos para este proyecto fueron Miguel Ángel (Italia), Auguste Rodin (Francia), Kathe Kollwitz (Alemania), Kotaro Takamura (Japón) y Augusta Savage (Estados Unidos).
La estatua final, fabricada en acero inoxidable, se muestra en el Museo de Tecnología de Estocolmo. Es una figura impresionante de 1,5 metros y media tonelada que sostiene un globo de bronce en su mano izquierda y la mitad del cuerpo cubierta por una especie de túnica.
Este tipo de arte evidencia cómo la IA puede ser un recurso valioso para la expresión artística, permitiendo la creación de obras que fusionan estilos de diferentes épocas y culturas de una manera que sería imposible para un solo artista humano. Las posibilidades que se abren son increíbles.
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